La UE da un voto de confianza a la OMI para regular las emisiones de CO2
El Consejo de Ministros de Medio Ambiente de la UE acordó ayer ampliar en un año su voto de confianza a la OMI para conseguir un acuerdo global que regule las emisiones de CO2 procedentes del transporte marítimo.
La propuesta, liderada por Grecia, Chipre y Malta, obtuvo el apoyo del resto de países comunitarios para que los trabajos encaminados a tomar medidas que reduzcan la contribución del transporte marítimo al cambio climático se lleven a cabo en la OMI, siempre y cuando la solución "se acuerde en 2010 y sea aprobada en 2011".
Este acuerdo, que es muy positivamente valorado por ANAVE, reconoce la importancia vital del transporte marítimo para el comercio y la economía de la UE, el carácter globalizado y altamente competitivo de este mercado y sus ya bajos niveles de emisiones por unidad de transporte.
Los Ministros de Medio Ambiente, que estaban preparando la posición de la UE en la conferencia de Copenhague sobre cambio climático, acordaron que la regulación de las emisiones de los buques se deberá "aplicar a nivel mundial, de manera que no se menoscabe la competitividad de las navieras europeas".
A cambio de este compromiso, las tres naciones marítimas mencionadas retiraron sus objeciones al objetivo de un 20% de reducción de las emisiones de CO2 del sector marítimo para el año 2020. Preocupada porque una regulación regional europea pudiese debilitar sus sectores marítimos, la coalición encabezado por Grecia había amenazado con vetar dicho objetivo, a menos que fuese acompañado de un firme compromiso internacional.
El acuerdo del Consejo, que también se refiere a la aviación, establece que “La UE apoya el uso de instrumentos de mercado globales para reducir las emisiones de estos sectores. Estos instrumentos se deberán desarrollar por la Organización Internacional de Aviación Civil y la Organización Marítima internacional, respectivamente”.