Descubrimiento contra las invasiones biológicas
Los organismos acuáticos a menudo son transportados en el agua de lastrado que utilizan los buques trasoceánicos para asegurar su estabilidad, lo cual lleva a producir de manera involuntaria la destrucción de numerosos hábitats acuáticos en todo el mundo.
Desde que llegan esas especies invasoras pueden provocar grandes desórdenes en los nuevos ecosistemas en que aparecen, forzando a diversas especies nativas a abandonar esas zonas, lo cual llega a provocar grandísimas pérdidas económicas. Gracias a una reciente investigación, publicada en la revista Biological Conservation, se sugiere que una técnica usualmente practicada para evitar la corrosión podría ayudar a prevenir la invasión de especies alóctonas, además de ayudar a la industria naviera a ahorrarse cientos de miles de dólares al año.
La corrosión de los tanques de lastre de los buques cargueros representa un coste muy significativo para la industria naviera. En la actualidad se utilizan carísimas pinturas para prevenir la oxidación de los mismos, pinturas que muchas veces resultan contaminantes para el medio ambiente. Sin embargo una nueva técnica podría ayudar a “matar dos pájaros de un tiro”.
Según Mario Tamburri, del Instituto de Investigación del Acuario de Monterrey, muchos organismos acuáticos son muy sensibles a los niveles de oxígeno. En sus investigaciones ha realizado simulaciones de tanques de lastre en laboratorio. Sus estudios sugieren que las larvas de 3 especies invasoras presentes en USA mueren en un medio en el que apenas exista oxígeno en solo 3 días. La manera en que se retiró el oxígeno en estos experimentos fue mediante la adición al agua de nitrógeno.
Considerando que la mayoría de los transportes transoceánicos duran mucho más tiempo, se podría evitar que éstas sobrevivieran al viaje y que pudieran extenderse en otras zonas que hasta el momento no sufren su invasión.
Aunque algunas especies, como las bacterias anaeróbicas u organismos con estados de resistencia, podrían sobrevivir a estos viajes en un medio nitrogenado, esta nueva técnica podría suponer una reducción sustancial en el número de potenciales invasores que son transportados en los tanques de lastrado. “La desoxigenación parecería ser muy cara para controlar a las especies invasoras presentes en los tanques, pero nuestros estudios sugieren que los beneficios anticorrosivos tendrían en suficiente peso como para que la industria naviera los generalizara en muy poco tiempo”, afirmó Tamburri.