PhonemovilL, Cafes Granell y Alzira protagonistas en la fiesta de las 300 millas A3
El náutico Moraira ofreció el pasado sábado por la noche una recepción-cena oficial, presidida por Antoni Joan Bertomeu, alcalde de Teulada y el vicepresidente del club anfitrión, Salvador Llobell, a los regatistas que tomaron parte en la regata de altura
Las 300 Millas A3 de Moraira – Trofeo Grefusa 2012 pasa página y ya pone sus miras en la edición de 2013. El pasado sábado por la noche el club organizador, Club Náutico Moraira, ofrecía una recepción-cena oficial a los grandes protagonistas: los regatistas. Casi todas las tripulaciones participantes, 23 barcos tomaron la salida el pasado día 18 de enero, estuvieron, estuvieron en la velada, pero sólo tres de ellos lograron llevarse todas la miradas: Phonemovil, de José Ignacio Vicent y con los hermanos Pablo y Nacho Braquehais en la tripulación como vencedores; Cafés Granell, de Agustín Granell y con José Francisco Pérez (Pancho) y Kiko Moret, como segundo clasificado y el Alzira de Agustín Gregori, formando equipo con Andrea Chericoni y Arturo Messeguer, quien fue protagonista por partida doble, ya que además de llevarse el trofeo por ser el tercer clasificado lo hizo también como primer barco en tiempo real.
La velada estuvo presidida por el alcalde de Teulada-Moraira, Antoni-Joan Bertomeu y por el vicepresidente del Club Náutico Moraira, Salvador Llobell, ante la ausencia de su presidente, Armando Bañón. Ambos estuvieron acompañados por Antonio Reig, concejal de Deportes del ayuntamiento de Teulada-Moraira; Agustín Gregori, en representación del patrocinador principal, Grefusa y el Ramón Martí Comodoro del náutico Moraira. Para Llobell, la presente edición ha sido “una de las más complicadas para la flota, y como prueba de ello es que sólo pudieron concluir diez barcos de los veintitrés que tomaron la salida”. El directivo no quiso despedirse en la edición 2012 sin antes dar las “gracias a Grefusa, entidades colaboradoras y patrocinadores, además de las instituciones, ya que sin ellos las 300 Millas A3 de Moraira no serían una realidad”, concluyó.
Como viene siendo habitual, y ya van once ediciones, una semana después de haber concluido la prueba el club ofrece una cena-recepción oficial a todos los participantes, que en la presente edición ha contado con 23 barcos, pero en especial a los vencedores. Una edición que no ha sido nada fácil, algo que ya es habitual en la prueba por las fechas y las condiciones meteorológicas que se encuentran los participantes. Si en 2011 y tras tomar Ibiza, en esa ocasión era el último escollo antes de enfilar proa hacia Moraira, el viento con puntas de 30 nudos de intensidad ponía en serio peligro a la flota, en la presente ha sido las duras encalmadas que han ganado la batalla a los barcos, prueba de ello ha sido que sólo han concluido 11 barcos de los 23 que estuvieron el miércoles 18 de enero en la línea de salida.
En cuanto a los protagonistas, el armador del Phonemovil, José Ignacio Vicent, destacó lo “compleja y difícil que ha sido la presente edición, desde tener buenas condiciones de viento a quedarnos parados por completo, pero es una regata muy atractiva y técnica”. Agustín Granell, por su parte, se mostraba muy contento de poder recibir el trofeo que le acreditaba como segunda clasificado: “Llevo años participando en la regata y siempre, por una u otra causas se escapaba la posibilidad de estar en el podio, ahora sí lo hemos conseguido, aunque hubiésemos podido estar un peldaño más arriba a no ser de las encalmadas en el último tramo y ahí es donde Phonemovil nos saco esa ventaja que al final iba a ser determinante”, concluyó. Brujo de Alberto Castro y Nou i Mig, de José V. Soler, también tuvieron su minuto, al recibir el trofeo que les acreditaba como cuarto y quinto clasificado, respectivamente.
El Alzira, con dos trofeos en su poder; tercer clasificado y primer barco en tiempo real, su armador Agustín Gregori apuntaba que “las 300 Millas A3 de Moraira es una regata muy compleja y cualquier barco puede estar en un momento determinado ocupando el primer puesto y en apenas unas millas más adelante puede quedarse atrás, aquí no hay enemigo grande o pequeño, las condiciones meteorológicas en estas fechas, en las que se celebra la regata, marcan el devenir de la prueba en la que en ocasiones los ‘grandes’ se ven beneficiados y en otras los ‘pequeños’ ganan la partida, hay que saber jugar todas las bazas y posibilidades que te puede dar tú barco”.
El Club Náutico Moraira, tras un breve descanso, empezará a esbozar las primeras líneas para la decimosegunda edición de las 300 Millas A3 Moraira-Trofeo Grefusa, aunque y como primer asalto, dentro de sus innumerables actividades deportivas, se centrarán en la próxima edición de la regata Moraira-Santa Eulalia, pero eso será ya en el mes de septiembre.